Ecuador: Congreso Eucarístico busca redimir la fraternidad a través de Cristo

Ariana Pernía Paolini – Ciudad del Vaticano

“Fraternidad redimida en Cristo” fue el tema de reflexión del martes 10 de septiembre, tercer día del  53° Congreso Eucarístico Internacional que se celebra en Quito, Ecuador, hasta el día 15. La jornada, fue inaugurada con la celebración eucarística presidida el Arzobispo de Santo Domingo y Primado de América, monseñor Francisco Ozoria.

Durante la santa misa, el prelado hizo hincapié en que “la Eucaristía es centro de nuestra vida y por tanto deberá ser siempre prioridad en todo nuestro quehacer”, a la vez que reiteró que ninguna actividad pastoral puede reemplazarla.. 

Tras recordar que en estos días que se ha estado reflexionando sobre las heridas del mundo, el prelado señaló que el Congreso está siendo una oportunidad para recuperar la importancia que tiene la Eucaristía en la vida de toda persona, esto con el fin de curar las heridas de tantos que están alejados de Dios, se lee en ADN Celam.

Asímismo, monseñor Ozoria invitó a los sacerdotes a priorizar la Eucaristía ante los eventos sociales E insistió en que la Eucaristía debe ser vista como centro, fuente y culmen de la vida de la Iglesia, en tanto que “todas las acciones pastorales que se realicen sin la Eucaristía serán vacías”.

Encuentro de fe con Jesús de Nazaret

Las reflexiones realizadas durante este martes en el marco del 53° Congreso Eucarístico Internacional fueron pronunciadas por la hermana Daniela Cannavina, secretaria de la Confederación Latinoamericana de Religiosos, quien aseveró que el “génesis de nuestra fraternidad es el encuentro de fe con Jesús de Nazaret”.

“Ahí está el saber y el sabor de la verdadera fraternidad. Jesús redime la fraternidad en la escucha de su Palabra de vida y alrededor de la mesa de su Cuerpo y de su Sangre que nos hacen hermanos universales, cercanos, compasivos, sin exclusiones y sin fronteras”, destacó la hermana Cannavina en su discurso.

Según lo expuesto en la web oficial del Congreso Eucarístico Internacional 2024, el tercer encuentro estuvo marcado por los testimonios Margaret Fellker, David’s Educational Opportunity Fund, y de monseñor Bienvenu Manamika, Arzobispo de Brazzaville, República del Congo.

En este sentido, la señora Margaret Fellker compartió su experiencia de cómo Dios nunca le abandonó cuando se dedicó a buscar a su hijo, desaparecido en Ecuador cuando realizaba un viaje como voluntario en el sur del país, por lo cual, en su travesía por la nación, Dios la acompañó y le obsequió un amor infinito para compartir con otros.

Por su parte, el Arzobispo Manamika, comentó que la Eucaristía se debe ser propuesta como un camino de renacimiento ante las dificultades que atraviesa el Congo, a la vez que desveló cinco desafíos que presenta la fe eucarística “de liberación, de paz, de responsabilidad, de promoción humana y de fraternidad”, a los cuales se puede responder mediante el testimonio de vida, para lograr que el culto no sea únicamente un refugio, sino, también, fermento de paz.