María, madre de Jesús, es considerada un símbolo de fe y esperanza para millones de personas en todo el mundo. Su devoción y entrega nos muestran el camino hacia una vida de fe en Dios y confianza en sus promesas.
La Inmaculada Concepción es una festividad que celebra la pureza de la Madre de Dios. Es un día sagrado para millones de fieles que veneran a la Virgen María como el símbolo de la gracia divina.