El perdón es un pilar fundamental en la construcción de relaciones familiares saludables. Según la doctrina católica, enseñar a perdonar es un acto de amor y misericordia que fortalece el vínculo familiar y fomenta la paz en el hogar.
En medio de la tormenta de conflictos, la perspectiva católica sobre el perdón brinda luz y esperanza. La enseñanza de Cristo nos invita a la reconciliación y a sanar heridas, recordándonos que el perdón libera al alma y abre el camino hacia la paz verdadera.