A través de los siglos, las representaciones de Jesús en el arte han evolucionado y se han adaptado a las distintas culturas y estilos artísticos. Desde las primeras representaciones en las catacumbas romanas hasta las obras maestras de Miguel Ángel, la figura de Jesucristo ha sido un tema recurrente y en constante transformación en la historia del arte.
En el arte renacentista, las representaciones de la Virgen María eran un tema recurrente, mostrándola como un símbolo de pureza y maternidad. Artistas como Leonardo da Vinci y Rafael se destacaron por sus obras que capturaban la belleza y devoción hacia la madre de Jesús.
El Infierno ha sido representado de diversas formas en el arte y la literatura católica a lo largo de los siglos. Desde las visiones terroríficas de Dante en la “Divina Comedia” hasta las impactantes pinturas de El Bosco, estas representaciones nos invitan a reflexionar sobre el castigo y la redención.