Educar en el respeto por la vida es el deber de todo ser humano. Los valores católicos ofrecen un marco sólido para inculcar esta enseñanza en niños y jóvenes, promoviendo el amor y la compasión hacia todo ser viviente.
La educación en valores cristianos desde el hogar es fundamental para inculcar principios como el amor al prójimo y la solidaridad. Transmitir estos valores a nuestros hijos les brindará una base sólida para enfrentar los desafíos de la vida.
La disciplina y la obediencia son valores fundamentales en la educación católica, que buscan formar a estudiantes íntegros y responsables. A través de la enseñanza de la Iglesia, se inculca a los jóvenes el respeto a las normas y la autoridad, preparándolos para enfrentar los desafíos de la vida con valores cristianos sólidos.
Santa Teresa de Lisieux, conocida como “la pequeña flor”, en su corta vida nos enseñó que la santidad está al alcance de todos, a través de pequeños actos de amor y humildad. Descubre su legado en “El pequeño camino de la santidad”.
La educación en la castidad y la pureza es un tema que ha cobrado relevancia en la sociedad actual. Promover valores de respeto y autocontrol es crucial para formar individuos íntegros y conscientes de su sexualidad.